Los mejores años de tu vida están frente a ti. Concéntrate en desarrollar las cualidades que consideras necesarias para ser exitoso. ¡No permitas que tus miedos sean más grandes que tu deseo de crecer! Esfuérzate cada día, haz cosas que te lleven a transitar el camino que te acercará a tu objetivo.
Enfrenta tus miedos con acción, es la única manera que conozco para lograrlo, y te hablo desde la experiencia. Durante mucho tiempo tuve miedo de iniciar una nueva actividad en mi vida; permití que la duda y la inacción me acompañaran. Esto solo lograba que se aplazara mi proyecto de vida hasta que me confronté y tuve que decidir si emprendía o claudicaba…y aquí estás leyéndome.
Una vez que hayas establecido tu proyecto de vida, deposita pensamientos positivos en tu banco personal: tu mente. ¡Obsérvate! Identifica tus miedos, tus fortalezas y tus debilidades. Trabaja para reprogramar tus creencias limitantes y pregúntate: ¿qué haré hoy para acercarme a mi objetivo?
David Schwartz escribió una frase que me impactó: «Edifique castillos, no cabe sepulcros», y las dos cosas las podemos hacer con nuestros pensamientos. Solo es cuestión de decidir lo que queremos, porque nuestra mente puede ser nuestra amiga o nuestra peor enemiga. ¿De quién depende cómo juega? Sí, de ti, amigo lector, solo de ti.
Piensa lo mejor de ti. Revisa tus pensamientos limitantes porque se repiten una y otra vez en tu mente, sin que te des cuenta de ello. Y justo en lo que tu mente se concentra, esto se forma o materializa en la vida.
Cuántas veces te puedes sorprender pensando que no eres inteligente, diciéndote cosas como: ¡qué estúpido, como fui a decir eso!, ¡ahí estoy de nuevo con mi imprudencia! ¡cada vez estoy más endeudado! ¡soy un fracaso!, ¡mi hermano es mejor que yo! ¡nací para perder!, y otras frases que como gotas de agua sobre una roca van golpeando tu mente y con ello tu vida.
Cuando observas esos pensamientos, que yo denomino depredadores, lo mejor que puedes hacer es reemplazarlos por afirmaciones poderosas y repetirlas con frecuencia para reprogramar tu mente y lograr que trabaje a tu favor.
Te invito a escribir tu frase de poder ¡No permitas que tus miedos sean más grandes que tu deseo de crecer! Esfuérzate cada día, haz cosas que te lleven a transitar el camino que te acercará a tu objetivo.