Cuando caminas por la vida y, de repente, un día te empiezas a preguntar ¿por qué no logro elevar mi nivel financiero? tu ser ha tenido un despertar, y es justo en ese momento que empiezas a buscar la respuesta.
Posiblemente piensas que la causa está afuera, pero no es así amigo lector es dentro de ti donde hallarás las respuestas y la fórmula para que tu viaje te lleve a la prosperidad.
Para empezar, quiero decirte que, de Dios, el universo, la energía, o lo que sea en lo creas proviene una fuente inagotable de riqueza disponible para todos por igual. Sin embargo, no todos estamos preparados para recibirla, incluso sin saberlo la hemos rechazado.
Tu mente está conformada por todos aquellos pensamientos que la habitan. De ahí la importancia de tomar consciencia acerca de lo que piensas con relación a cada área de tu vida. Hoy nos centraremos en lo que piensas con relación al dinero, la riqueza, la abundancia y la prosperidad.
Para comenzar es importante que procedas a revisar qué pensamientos estás teniendo, revisa también qué conversaciones internas llegan a tu mente acerca de la prosperidad, si realmente sientes que la mereces en este momento, y toma nota de esos pensamientos que encuentras están ahí presentes.
Algunas preguntas que pueden acompañarte a hacer esta revisión principal son:
¿Qué escuchaste decir acerca del dinero a tus padres o a esa figura de autoridad que tuviste en la infancia?
¿Quizás hay que trabajar duro para sobrevivir?
¿Cuáles son los discursos culturales de tu país en relación con el dinero?
¿No hay que mostrar lo que uno tiene porque la gente se llena de envidia?, o quizás, refranes populares como el siguiente: Si tiene tanto dinero no es precisamente por andar rezando.
Revisa cuidadosamente las opiniones o los juicios que tienes acerca del dinero y cómo pueden estar obstaculizándote para crecer financieramente. Tal vez pienses que el dinero se te va como agua entre los dedos o que el dinero es una ilusión, y más tardas en recibirlo que en gastarlo.
Estos pensamientos que habitan tu mente cumplen su cometido sin ningún esfuerzo. Se constituyen en tu sistema de creencias, y ten presente que aquello en lo que crees se materializa.
Ahora que ya has reflexionado un poco, te invito a que hagas la lista de tus creencias heredadas familiar y culturalmente, más los juicios u opiniones que hay en ti.
Debes saber que no basta con hacer conciencia de los pensamientos que habitan tu mente, es necesario que entiendas el costo que esa forma de pensar tiene para tu vida; actuamos guiados por nuestra forma de pensar.
Lo que siembras en tu mente es justamente lo que cosecharás.
No es posible que en tu jardín interior siembres pensamientos de escasez y recojas abundancia o viceversa, son leyes físicas que también operan a nivel mental. ¿Habías pensado en esto antes?
Sé que quieres entender más acerca de la relación mente – dinero, es un tema que nos interesa a todos, te invito a que me sigas en este blog de entregas semanales. ¡Estaré compartiéndote de este y muchos temas más!